13 de marzo, 2024
Know your worth / Now you work
¿Has visto el meme de Big Bird rodeado de personas en una oficina? Si tu respuesta es afirmativa y cuando lo viste pensaste “Es como yo; la única persona rara en mi trabajo aburrido.”, te tengo noticias: ¡Hemos vivido engañadxs!
Esta imagen proviene de un sketch en donde el personaje de Plaza Sésamo realiza una pasantía para la plataforma de comedia Funny or Die. Aquí lo importante no son las situaciones que terminan en resultados nada favorables para el primo de Abelardo, sino que todo esto pasó en un “ambiente divertido”.
¿Cómo es posible que un ave humanoide de casi tres metros se sienta fuera de lugar en un sitio en el que la principal tarea es ser gracioso y la experimentación creativa?
Es posible que, al igual que Big Bird, sientas que no eres lo suficientemente divertida cuando tu trabajo lo requiere, pero ¿por qué?
Anteriormente, yo había trabajado para personas cuya idea de “ser creativas” involucra pasar de Arial a Comic Sans. Mi oportunidad de tener un espacio en el que pudiera explorar y proponer más allá de lo usual apareció cuando llegué a mmasm. Me sentía feliz de haber llegado, pero algo no me permitía sentirme cómodo. “Esto es diferente a lo que conozco, ni siquiera sé cómo describir qué sucede.” pensé en su momento, pero ya existe (bueno, ya conozco*) el término correcto para describirlo.
¿Síndrome del impostor? Kinda.
«Estaba convencido de que tocarían a la puerta […] para decirme que me habían descubierto y ahora tendría que conseguir un trabajo real, uno que no consistiera en inventar cosas y escribirlas.» -Neil Gaiman, Make Good Art
Al igual que Neil Gaiman, otras personas sobresalientes como Maya Angelou y Einstein llegaron a comentar que su trabajo no merecía la atención que la gente le daba.
El síndrome del impostor es sentir que no eres una persona calificada o con la experiencia necesaria para estar en un lugar; pero (ojo, esto es importante), si estás ahí, lo estás por algo.
[En pleca] Según El Economista, el 76% de los mexicanos han confesado haber experimentado el síndrome del impostor; 46% de forma esporádica y 30% recurrente.
Cualquier persona puede sentirse así y no compartirlo por algo llamado ignorancia pluralista, que es cuando crees que solo eres tú quien duda de sí mismx porque nadie más lo demuestra… incluso si es una agencia de marketing y publicidad.
El síndrome del impostor creativo
“Sin creatividad no hay negocio. No importa la industria en la que estés, fomentar el espíritu de la creatividad es lo que nos lleva a otro nivel.” -Daniel Lamarre, Vicepresidente de Cirque du Soleil.
Si ser una persona creativa es necesario en puestos administrativos, imagina la presión que puede sentir un copy o una diseñadora. Como personas dedicadas a trabajos creativos, nos preocupa que los demás crean que lo que hacemos es “especial”. Construimos nuestras carreras comparando portafolios y nuestro negocio se resume en intercambiar creatividad por dinero.
El síndrome del impostor puede afectarnos especialmente porque no hay per sé una manera cuantitativa de medir qué es un trabajo «bueno» al momento de realizarlo, solo resultados que pueden verse influenciados por mil variables, pero así como hay miles de factores que impactan un proyecto, también hay mil maneras de lidiar con el síndrome del impostor.
7 cosas que deberías hacer
- Acéptalo: El síndrome del impostor es parte de lo que somos; de nuestra industria y de nuestra singularidad. Y ten en cuenta que los impostores reales no tienen síndrome del impostor. ¡Eso es algo positivo!
- Aprende el idioma: Para crecer, debes hacer las cosas que te intimidan hasta que las domines. Si se habla de manera diferente en tu nuevo trabajo, aprende términos clave para sentirte en confianza.
- Inicia tu red de contactos: No estás solx al experimentar el síndrome del impostor (¡ignorancia pluralista!). Acércate a tus compañerxs para integrarte y aprovecha para compartir tus inquietudes.
- Compara tu trabajo: No todo es una competencia, pero pensar que estás en una puede sacar lo mejor de ti. Observa lo que hacen otras personas para colaborar, aprender e inspirarte.
- Expande tu campo de expertise: ¿Eres copy? Dibuja. ¿Diseño? Escribe un journal. Dedicar tiempo a actividades ajenas a las tuyas es divertido y te servirá como entrenamiento cruzado creativo.
- Confía en el proceso: Al valorar tu trabajo, (emocional y económicamente) refuerzas tu confianza creativa, y aumentas tu stock. ¡Por favor, aléjate del pesimismo!
- Cuestiona lo que haces, no a ti: La importancia de cuestionar tus ideas y habilidades sin cuestionarte a ti mismx te ayudará a saber en qué debes enfocarte para mejorar.
Y para mí, el consejo más importante…
Crea como solo tú lo sabes hacer
“Descubrir tu valor te ayudará a superarte en muchos entornos.” -Roberto Ibarra, Copy de mmasm.
Espera un momento. Siento que esto lo había escrito ya en algún lado y no solo lo pensé al redactar este blog… efectivamente, lo hice para uno de nuestros clientes.
¿A qué voy con esto? A que, aún cuando escribo algo en mi trabajo, lo hago desde mi punto de vista; de esta manera cumplo con mi objetivo y dejo mi sello personal en lo que publico; eso que me hace ser yo, sin olvidar a quién va dirigido. Al final de cuentas, nuestra manera de hacer las cosas es la razón por la que llegamos a donde estamos.
Si llegaste a tu nuevo puesto por tus méritos, no tendrías por qué cuestionar tus capacidades, pero podrías preguntarte si encajas con los demás. Estar sentado o sentada en una junta apuntando las palabras que no entiendes para después buscarlas en Wikipedia no necesariamente significa que eres un fraude, lo mismo pasa si llegas vistiendo un traje a una sala donde todas las personas llevan camiseta, simplemente vives un choque cultural con tu nuevo ambiente laboral; como Funny or Die o mmasm: ambientes creativos.
No se trata de vencer el síndrome del impostor, sino de ser conscientes de cómo nos sentimos y avanzar. Eso estoy haciendo ahora. 🙂